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REFLEXIONES Y OPINIONES
POR ARIEL RINCON MACHADO
Hace algunos días con un grupo de amigos empresarios y otras instituciones, estuvimos en el vecino municipio de Alpujarra en el Departamento del Tolima, una localidad ubicada a hora y media de la capital del Huila, con 3.200 habitantes en la cabecera urbana, 23 grados centígrados de temperatura y caracterizada por sentirse más del Huila que de su Departamento. Alpujarra a principios del siglo pasado, perteneció a esta región y siempre ha tenido vínculos comerciales y de hermandad con el Huila, y en lo personal creo que ha sido positivo para las dos partes.
El joven dinámico y emprendedor alcalde de Alpujarra, Pablo Gustavo Hernández, quiso invitar a la Cámara de Comercio de Neiva a realizar una Misión Comercial y de Integración de empresarios, instituciones y periodistas del Huila a ese municipio. Su entusiasmo logró contagiarnos, tanto así, que el sábado anterior viajamos cerca de 45 personas, salimos desde tempranas horas de la mañana transitando una carretera en buenas condiciones salvo algunos kilómetros no pavimentados, el Alcalde nos recibió con banda papayera, jugos naturales, frutas, bizcochos, pan y un exquisito vino que se prepara en tierra alpujarreña, luego degustamos un delicioso tamal tolimense.
Ya en el desarrollo del recorrido, lo primero que conocimos fue el proyecto de turismo con enfoque en termalismo y naturaleza que seguramente será exitoso. También visitamos la pista de aterrizaje que está en construcción con una longitud de 700 mts que supera los 2 mil millones de pesos y luego estuvimos en el proyecto de cafés especiales que sin duda alguna tendrá mucho futuro. Seguidamente se ofreció un evento social que permitió generar una dinámica comercial con los amigos de Alpujarra, pero también dentro del mismo grupo de empresarios que visitamos la localidad. Entrada la tarde dimos una vuelta por las limpias y amplias calles pavimentadas de doble calzada de ese tranquilo y acogedor municipio, donde uno observa calidad de vida; claro hay humildad pero no miseria. Finalmente nos invitaron a conocer las lagunas de oxidación donde hacen el tratamiento del 100% de las aguas residuales y este sistema está proyectado para atender 20.000 habitantes. Actualmente Alpujarra tiene un presupuesto de un poco más de $900 millones de pesos al año, mucho menor que la localidad más limitada del Departamento del Huila. ¡Imagínense que modelo de municipio!. Este encuentro fue supremamente exitoso tanto para los empresarios de Alpujarra como para los mismos huilenses, pero definitivamente lo que nos descrestó es el modelo de desarrollo municipal, digno de admiración y de copiar lo bien hecho, creo que fue lo más significativo, por encima de los resultados comerciales. Considero que es imperativo conocer y aprender de este municipio, al cual aspiro volver institucionalmente en la grata compañía de un grupo de alcaldes huilenses que así lo quieran para conocer más de esta hermosa localidad, que tiene un Alcalde con iniciativas, un dirigente cívico como Jaime Osorio con proyección y toda una comunidad unida que nos acogió con cariño y hospitalidad. Amigos lectores no necesitamos salir del País para conocer verdaderos modelos de desarrollo.
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