ANECDOTAS DE LAS CAMPAÑAS HEALING THE CHILDREN

Todas las personas de la Fundación querían venir a Neiva, llegando a la ciudad tres médicos líder (Médico especialista de máxima categoría) cuando normalmente solo viaja a cada país uno. En esa primera jornada de 1993 el número de cirugía fue de 152.

En las cinco primeras Jornadas había tiempo para dictar conferencias a los médicos neivanos y estudiantes de la capital, por parte de la Fundación Healing The Children, pero con el pasar del tiempo y el número de cirugías ahora no se dictan conferencias pero ahora se realizan más cirugías.

Un médico anestesiólogo llamado Jay Wogglom que enfermó de cáncer decidió participar de la campaña de salud en Colombia a pesar de que los médicos en su país le prohibieron el viaje, pero a pesar de ello, estuvo en Neiva muy delicado de salud y pidió visitar un orfanato “La casa del niño arzobispo Ismael Perdomo”, antes de ir fue a un almacén y compró un televisor y un VHS donando estos elementos al orfanato, pues, él había adoptado dos niños uno negro y uno blanco a quienes quería mucho, su promesa fue regresar y traer muchos regalos. Pero al mes de terminar la Jornada de Salud murió en Estados Unidos y al año siguiente la Fundación Healing The Children visitó al orfanato llevando los regalos prometidos por el médico anestesiólogo.

La Fundación Healing The Children se lleva para Estados Unidos a los niños que necesitan más tecnología y más de una operación para quedar bien. Hace cuatro años se llevaron una niña de pie chapín y mano chapín.